Vida Rural Solutions. Claves para lograr una gestión fitosanitaria del cultivo de sandía bajo plástico basada exclusivamente en el control biológico
Ya hace años que el control biológico está bien implantado en buena parte de los cultivos hortícolas bajo plástico, formando parte importante de las estrategias de control de plagas dentro de los protocolos de gestión integrada. Esto es una realidad en cultivos de ciclo largo, sin embargo, aún queda mucho camino por recorrer en cultivos de primavera de ciclo corto como la sandía o el melón.
En este tipo de cultivos el control biológico es una asignatura pendiente, pues al tratarse de cultivos cuya duración no va más a allá de los 4 meses, la mayor parte de los agricultores piensan que, o no es posible implementarlo, o no merece la pena hacerlo. En este sentido, existen una serie de falsos mitos relativos a la ineficacia del control biológico en los cultivos de primavera, que están impidiendo la adopción generalizada de estas estrategias.
Estas falsas creencias no tienen ninguna justificación ni base científica y, sin embargo, sí que tienen un fuerte impacto en el empeoramiento de las condiciones fitosanitarias de partida de los siguientes cultivos de otoño. Es una realidad que la práctica del control biológico implica que las poblaciones de insectos plaga son significativamente menores al final del cultivo que cuando se emplean productos fitosanitarios. En los últimos años, la producción de hortalizas es mucho más intensiva, prolongando mucho en el tiempo los ciclos de cultivo y dejando mucho menos tiempo de descanso entre ciclos, por lo que en este escenario se hace especialmente importante iniciar los cultivos con un buen el estado fitosanitario. (Artículo completo pinchando el título)